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Los usuarios del Metro de la Ciudad de México exigimos un Metro ¡libre de ambulantes!

Vivo en el Distrito Federal de la Ciudad de México, y como no tengo automóvil ni motocicleta, me veo en la necesidad de transportarme en Metro. Vaya a donde vaya siempre es en Metro. Si yo fuera un usuario inconstante de este medio de transporte, probablemente no me molestaría en exigir que se respeten sus instalaciones o mis derechos, pues no vuelvo a comprar un boleto y se acabó.

Desgraciadamente esto no es así y tengo que soportar a diario que los vagoneros pisoteen mi integridad física (auditiva) y mi tranquilidad, ambas estatuidas como derechos de los usuarios del Metro.

¿Por qué este blog? Porque ya no soporto más que cierta clase de gente atropelle la ley y con ella mi persona, bajo el argumento de que no hay trabajo, de que el trabajo que hay es mal pagado o de que todos tenemos derecho a un trabajo. Por Dios, sí, ¡sí!, no hay trabajo: yo mismo soy desempleado a pesar de tener un poco de educación académica; el poco trabajo que hay o bien es mal pagado, o bien no aplica a la mayoría de los ciudadanos; y desde luego que todos tenemos derecho a un trabajo. Gritemos todos al unísono: ¡sí, es cierto! Pero gritemos con más fuerza aún: ¡con tal de no pisotear a nadie, y menos a gente igual de miserable que nosotros!

¿Pero por qué este blog?, repito. Mi indignación ha llegado tan lejos, que he buscado algún movimiento a favor de un Metro seguro, o contra el ambulantaje del Metro, para adherirme y buscar que las autoridades competentes hagan cumplir la ley en este casi excelente medio de transporte. Pero no he encontrado nada. Lo más que he hallado son algunos ciudadanos que levantan la voz en un blog perdido en la web. Pero ningún movimiento, nada serio. Yo quiero, si no terminar, sí iniciar un movimiento a favor de un Metro limpio, libre de ambulantes. ¡Porque nuestro Metro es un transporte, no un mercado!